La Educación Infantil es la etapa educativa que atiende a las niñas y a los niños hasta los seis años, con la finalidad de contribuir a su desarrollo físico, afectivo, social, intelectual y espiritual.

Esta etapa es clave en el desarrollo de la persona. Para que los efectos de esta educación sean positivos requiere de contextos estimulantes y de prácticas educativas basadas en el afecto, la autonomía, la exploración y el juego.

Se atiende al progresivo desarrollo afectivo, a través de la construcción de nuevos vínculos y relaciones con las personas adultas y entre los niños y las niñas de su edad. Se facilita que elaboren una imagen positiva y equilibrada de sí mismos, así como que adquieran autonomía personal y hábitos de control corporal. Se promueve el descubrimiento de las características físicas, sociales y culturales del medio y la adquisición de pautas elementales de convivencia y relación social, así como el desarrollo de la comunicación y el lenguaje.